La gestión pesquera

Se espera que, antes de entrar en propuestas promocionales de la pesquería se realice un estudio que permita determinar cuáles serían las especies objetivo, cuál el volumen de su biomasa, cuáles serían los períodos de vedas reproductivas, cuál sería el efecto ecosistémico de su explotación, para llegar a determinar una tasa anual de captura por especie. De esta información se deriva la capacidad de bodega que debería tener una flota con intención de incursionar en la actividad extractiva, la cuota anual de extracción, las cuotas individuales a asignar y los períodos de pesca. Solo entonces podríamos pretender introducir mayor esfuerzo pesquero sobre el ecosistema marino de Humboldt.

26 de julio de 2016

¿Que puede hacer la pesca por las poblaciones vulnerables del Perú?

En agosto, que empieza a operar el gobierno elegido este año, una ciudadanía ilusionada espera cambios que mejoren las cosas en cada sector. En Pesca, el tema resulta más expectante por cuanto el Plan de Gobierno no hace mención expresa a la pesquería y el nuevo Titular del Pliego no tiene experiencia en el sector. ¿Qué peso tendrá Industria y qué importancia se dará a la Pesca y Acuicultura?

Se debería empezar por evaluar el Plan Estratégico Sectorial Multianual que deja el gobierno saliente y que constituyó un nuevo formato para alinearlo al Plan Nacional de Diversificación Productiva. Lo negativamente novedoso de este PESEM, es que relegó a la pesca y acuicultura a su simple mención y participación como aportantes del PBI y diluyó el documento en un mar de conceptos, fórmulas y análisis complicados y alejados del espíritu simple de los anteriores planes. Para sus autores, la actividad pesquera y acuícola solo es importante desde la perspectiva de su aporte al producto Bruto Interno.

En esta edición se publica una nota detallada al respecto.

El asunto no debe ser subjetivo ni analizado solamente en función a la experiencia de las nuevas autoridades. El tema es técnico y merece ser técnicamente evaluado porque el PESEM es, o debería ser, la brújula que marca el rumbo del sector por cinco años. De allí deriva todo lo demás.

El sector es tan complejo y necesitado de tantas reformas, que sería iluso pensar que se podrá hacer grandes cosas o cambios. Bastaría que se den pequeños pasos en beneficio de una mejor participación del país en los resultados de la extracción de recursos pesqueros, en beneficio de hacer a la pesca más inclusiva desde la perspectiva alimentaria, y en avanzar hacia pesquerías sostenibles y libres de corrupción.

Difícil; pero imposible si no se cuenta con Directores Generales y de Línea, jefes y funcionarios de OPDs honestos, comprometidos con el sector y con experiencia y conocimiento del mismo. Empezar a trabajar al mismo tiempo que se empieza a aprender no es la mejor receta, sobre la cual los últimos años han dado el mejor ejemplo.

Se requiere de acciones concertadas, técnicas y socialmente inclusivas, dejando de lado la confrontación y el enfrentamiento. La habilidad para mantener el sector en equilibrio definirá el éxito de los nuevos integrantes del equipo de este gobierno.

Es hora de la alimentación nacional y de lo que la pesca peruana puede hacer por sus poblaciones más vulnerables. Porque el Estado no puede olvidar su deber y su obligación con las poblaciones más pobres del Perú. Tiene que dejar de priorizar y debatir temas de una industria que ya está regulada, para concentrarse en el objetivo final más importante de la pesca, que debe ser la alimentación nacional. La desnutrición y la anemia infantil son realidades sobre las cuales los productos pesqueros pueden significar un aporte importante.

Las ciudades principales y las poblaciones costeras de una u otra forma acceden al pescado y satisfacen más que necesidad de proteína, requerimientos gourmets. Por otro lado, aunque lejos del alcance de todos los bolsillos, eventualmente aparecen recursos accesibles como el bonito, caballa y jurel que adquieren pobladores costeros y de algunas principales ciudades del interior.

Pero ¿qué posibilidades tienen las poblaciones dispersas a más de 3,000 metros de altura, que solo recordamos cuando la televisión las pone en pantalla en época de friaje? El problema va más allá de programas sociales asistenciales que no resuelven el problema de fondo. Hay que buscar soluciones sostenibles.

La Revista Pesca expresa su saludo a las nuevas autoridades y su deseo porque la nueva administración de pesquería tenga el mejor de los éxitos.

Marcos Kisner Bueno

La revista Pesca es un medio de información alternativo referido a temas del mar y de la pesquería.

Difunde información, ideas y  corrientes de opinión que tienen por objeto crear conciencia de la necesidad de hacer sostenible la extracción de los recursos marinos, de seguridad alimentaria y  del cuidado del medio ambiente. Pero sobre todo, contribuir con información para que el lector empiece a formarse una opinión propia sobre la problemática pesquera.

Los invito cordialmente a leer la edición de la Revista Pesca correspondiente a AGOSTO 2016 y a compartirla dentro de sus círculos y redes sociales.