La gestión pesquera

Se espera que, antes de entrar en propuestas promocionales de la pesquería se realice un estudio que permita determinar cuáles serían las especies objetivo, cuál el volumen de su biomasa, cuáles serían los períodos de vedas reproductivas, cuál sería el efecto ecosistémico de su explotación, para llegar a determinar una tasa anual de captura por especie. De esta información se deriva la capacidad de bodega que debería tener una flota con intención de incursionar en la actividad extractiva, la cuota anual de extracción, las cuotas individuales a asignar y los períodos de pesca. Solo entonces podríamos pretender introducir mayor esfuerzo pesquero sobre el ecosistema marino de Humboldt.

8 de agosto de 2010

La conservación y uso sostenible de los recursos marinos

Las aguas marinas cercanas a la costa peruana, son cada día víctimas de un uso intensivo que genera contaminación, debida principalmente a actividades pesqueras, mineras, industriales y por las redes de desagüe que generan una alta presión ambiental.

Las zonas costeras peruanas son uno de los espacios geográficos del planeta con mayor valor ecológico y económico, gracias a su especial riqueza proveniente de las condiciones oceanográficas derivadas del fenómeno de afloramiento. La excepcional abundancia de anchoveta y de otros recursos marino-costeros que se dan en las aguas y costas del Gran Ecosistema Marino de la Corriente de Humboldt  son resultado de la altísima productividad primaria característica de este ecosistema. Esta productividad primaria es canalizada casi directamente hacia los niveles tróficos superiores por la anchoveta,  pez pelágico, planctívoro, que constituye el principal alimento de las especies carnívoras (peces, aves y mamíferos) del ecosistema .

Por tanto, la principal obligación del Estado es contribuir con la estrategia para la gestión integrada, por la que se promueve la conservación y uso sostenible de los recursos marinos y costeros de modo equitativo. Emprender acciones concretas encaminadas a divulgar y socializar los resultados obtenidos de la investigación es indispensable y urgente.

Es necesario hacer reflexionar a la institucionalidad y a la sociedad en su conjunto sobre la importancia que reviste el tema y, generar actitudes y compromisos que conlleven a acciones concretas para preservar estas áreas.

Es necesario incentivar y desarrollar investigación enfocada al ecosistema para que logre una definición de la vulnerabilidad de los sistemas biogeofísicos y socioeconómicos a la explotación no regulada de sus pesquerías.

El Estado debe propiciar que todos asumamos la responsabilidad de hacer causa común con la defensa de nuestras zonas costeras, para preservar sus bienes y servicios. Así como, convertirse en una invitación a poner nuestros ojos en el medio marino y costero. Este esfuerzo resulta de suma utilidad para las nuevas generaciones, a quienes les corresponde pagar las deudas ambientales que dejamos las generaciones pasadas y presentes.

La falta de políticas integrales, así como la baja asignación de recursos para llevar a cabo investigaciones técnicas y científicas no han permitido avanzar mucho más en el conocimiento básico y por ende la posibilidad de incluir sus resultados en la planificación del sector. Podría decirse que la información con que se cuenta es aún incipiente como para convertir esta en una verdadera herramienta para la toma de decisiones.

El Estado debe sensibilizar al país sobre la importancia vital de la franja litoral y los impactos generados sobre el hombre y su entorno por la industria pesquera, minera y petrolera y las consecuencias que sobre la economía nacional generan estos impactos.

Las zonas costeras constituyen un sistema único de recursos debido a la presencia de ecosistemas valiosos y de gran productividad y biodiversidad, que requiere enfoques especiales de manejo y planificación. Esta base de recursos fundamenta por tanto el bienestar y la viabilidad económica de las generaciones actuales y futuras residentes en esta área.


No hay comentarios.: